Concursos

Concurso rápido de microcuentos

Queridos alumnos y alumnas de quinto y sexto : tanto a vosotros y vosotras, como a mí , nos encantan los cuentos (y las poesías y las leyendas y el teatro...), así que estáis invitados a participar en mi maravilloso concurso de microcuentos (de 100 a 150 palabras). Que sepáis que también habrá un pequeño regalo para el que mejores comentarios se lleve. Os espero impacientemente. Hasta pronto.
   

Fecha para escribirlos	Día para votarlos	Publicación del ganador
desde hoy, al 4 de diciembre	del 5 al 7 diciembre	8 de diciembre

El paraguas mágico

   Érase una vez una niña llamada Paula que tenía un paraguas mágico que descrubría tesoros. Una vez, esa niña cogió el paraguas y se fue a pasear. Al cabo de un rato, el paraguas empezó a pitar: pi,pi, pi. Paula se extrañó mucho y miró al suelo, ¡eran veinte euros! Se alegró mucho y siguió andando felizmente.Cuando llegó a casa, le dijo a su madre:

_Mira, mamá, me he encontrado veinte euros.

  Al cabo de un año, se encontró un cofre pero no podía abrirlo. Fue a su casa, lo abrió por fin y…¡contenía oro, joyas, dinero…! Su familia, gracias al paraguas, dejó de pasar hambre. Y pudo ayudar a otros que lo estaban pasando mal también.                  
                                            Juan Membrilla Jiménez 5º

El heredero alérgico

  Monky era el príncipe de una manada de monos de un árbol. Un día, el rey descubrió que su hijo se enfermaba al comer plátanos. Entonces el rey mandó a todos a buscar remedio: probó mandarinas pero no estaban tan dulces…Y así probó con el tacto, el color…Un día, el pequeño monito salió del árbol y lo único que había como alimento eran plátanos, así que comió uno de esos plántanos que no eran de su árbol y ¡no enfermó! Monky, ya extrañado, miró los dos árboles y pensó: ”el árbol donde vivo no da plátanos sino bananas”. Era , realmente, alérgico a las bananas, no a los plátanos ¡bien!. El pequeño monito ya no tendría que renunciar al tacto, el sabor…del exquisito plátano.

                                                                       Susana Hernández 5º

El joven soldado

  Había una vez un joven soldado que murió en el año 1581,luchando.

Un día, en el año 2000, se despertó y salió de su tumba. Se fue a la ciudad y…¡había cosas que se movían: coches, furgonetas…Se asustó mucho y miró al cielo. Había cosas que volaban, como pájaros grandotes. Se tropezó con un niño y éste se rió de él. Después, yo, que iba paseando, me encontré con el soldado y le dije: “hola, ¿por qué vas vestido así?

-Porque me morí en la guerra, en el año 1581 y no sé qué ha pasado que me he despertado hoy- contestó el soldado.

-¿Quieres quedarte en mi casa?- le pregunté. Y él me dijo, muy contento, que sí. Desde ese día, el soldado y yo nos hicimos muy amigos y no quiso volver a la tumba nunca más.

                                                                                             Tristán Alonso Pérez 5º

El poder de la fantasía

   Érase una vez unos duendes que eran infelices por una razón muy triste: no creían en la fantasía y eran muy negativos.
 No sabían que la fantasía era algo tan bonito...Pero como eran así, no se daban cuenta de lo que se perdían.
  Un día apareció Nometa, una duendecilla que desapareció hace un tiempo y, como eran tan negativos, pensaban que estaba muerta.
  Ella vino muy feliz ya que había comprendido qué era la fantasía y para qué servía: cuando los demás duendes iban paseando por un triste paisaje, se ponía, al momento de colores y florecían pequeñas florecillas. De esta manera, todos creyeron en la fantasía.
                                                             Lucía Fernández Montalbán 6º

La importancia de los libros

Érase una vez una niña que se perdió en un bosque y, al cabo de los años, un hombre la encontró y le preguntó por qué estaba allí, qué le había pasado. Ella había perdido la memoria no sabía cómo.
 El señor que la encontró, todas las noches le leía un libro para refrescarle la memoria y, al final, gracias a uno de los libros que el hombre leyó porque contaba una historia parecida a lo que ella le había ocurrido,
se acordó de todo. Ambos construyeron una barca para la niña y se despidió con tristeza pero con alegría a la vez porque iba a ver por fin a sus padres.
  Desde aquel momento, la niña se dio cuenta de lo importante que podía llegar a ser un libro y empezó a leer todos los que le gustaban.
                                              Mª del Valle Lorente Vázquez 6º

Serna, el pueblo volador

     En un pueblo llamado Serna, una tarde, unas nubes negras y enormes empezaron a cubrir el cielo azul.
     En las afueras del pueblo, vivía una familia compuesta por el padre, la  madre y los dos hijos, llamados Nusa y Chispo. Ese día, al salir de casa para ir al pueblo, al colegio, observaron que había una gran tormenta. Comenzaron a andar. Nusa tenía miedo, todo estaba muy gris. Poco a poco, Nusa y Chispa vieron el pueblo flotando. Los coches volaban, también los contenedores, los perros, las farolas... Las casas parecían nubes rectangulares. En definitiva no había gravedad.
   Estaban muy asustados cuando, de pronto, apareció un policía, y les indicó hasta dónde se podía pasar.
   Volvieron a casa y les contaron a sus padres lo sucedido;aunque éstos ya lo sabían: lo habían escuchado en la radio.
   Los niños fueron a la casa de Cataplum, un mago muy conocido que vivía en el bosque. Él hizo que todo volviera a la normalidad. Y desde ese momento, todos los niños reciclaban, utilizaban el transporte público...porque al final se dijo que el problema de que Serna flotara era por la contaminación.
  Y colorían colorado, este cuento se ha acabado.
                                                      Andrés Gallardo Romacho 5º

El gato y la rosa

 Érase una vez ,en el campo, un precioso gato blanco, con ojos verdes que parecían esmeraldas.
 Un día, el gato vio una planta y esa planta estaba caída, así que decidió traerle agua. Al ver que funcionaba, se puso muy contento pero estaba agotado y se fue a su casa a descansar.
  Al día siguiente, la planta tenía un capullito, pero una niña intentaba arrancarlo y el gato no la dejó. La rosa estaba ilesa y el gato estaba comiendo cuando una cebra apareció. El gatito no dejó de ocultar con su cuerpo la planta hasta que se fue el animal tan grande.
 La planta tuvo una flor ¡era una rosa!.
 Al final, nadie se comió la planta y el gato y la rosa fueron felices para siempre.
                                                                     Lucía Hurtado 5º

Pepito el jardinero

 Érase una vez, en un pueblo chiquitito, un jardinero muy apañado pero...qué os digo yo, era muy patoso y no sabía hacer nada. Todo lo que tocaba lo destruía. En todos los negocios que trabajaba , se arruinaba.
 Cierta vez trabajó de jardinero pero, como no sabía, en vez de coger la maquinilla, lo hacía con las manos.
 Un día se cayó en un agujero muy extraño, bueno, así lo veía él, porque era realmente una simple madriguera. Un conejo que estaba allí le mordió y desde ese día no ha sido un patoso y su familia está mucho más contenta ahora con él.
                                     Eva Pérez Montalbán 5º

Calú, el negrito estrella

Había una vez un niño negrito de África que se llamaba Calú, al que le gustaba mucho jugar al fútbol. Creció y ya era un adolescente. Jugando al fútbol era un prodigio y su sueño era jugar en la Selección inglesa.
  Un día, el presidente del Manchester City decidió convocar un partido benéfico. Calú fue, sin duda, el héroe del partido y el presidente del Manchester city decidió ficharlo para el equipo.
  Calú se casó y vivió feliz con su familia y el fútbol. Más tarde, tuvieron dos gemenos: Federico y Carlos y con respecto al fútbol, Calú fue fichado por el Real Madrid que, ese año, ganó la bota y el balón de oro.
                                                                 Alejandro García 6º

La noche de Halloween

Era una noche de Halloween, en la que Eva y Clara fueron a pedir caramelos. Se encontraron a otros niños que le dieron un susto y ellas se asustaron pero los niños se fueron por fin. Eva y  Clara siguieron pidiendo caramelos y encontraron una casa tenebrosa. Entraron a ver qué pasaba cuando, de pronto, se cerró la puerta y no pudieron salir . Allí se quedaron hasta que un vampiro apareció y las secuestró.
  Sus padres y madres esperaban muy preocupados y fueron a ver qué pasaba. Cuando llegaron a la casa tenebrosa, destruyeron al vampiro y Eva y Clara fueron rescatadas sanas y salvas por sus padres y madres.
¡Menos mal que todo acabó bien!                
                                                  Mª del Paso Álvarez 5º

Julia

 Hace mucho tiempo, en un lugar muy lejano, una niña llamada Julia vivía en un orfanato donde siempre estaba triste, estaba como apagada.
 Un día soleado, alguien llegó al orfanato. Era una niña con ojos grandes que, al instante,se hizo amiga de Julia. La niña se llamaba Ainhoa y llegó al orfanato porque sus padres la habían abandonado.
 Desde ese día, Ainhoa y Julia compartieron habitación. A partir de la tercera semana en ese lugar, Ainhoa, todas las noches leía un libro en voz alta. Julia, sin más remedio, la tenía que oír. Entonces, Julia,cada vez se notaba más animada para hacer cosas; y Ainhoa se dio cuenta de que desde que empezó a leer libros. Julia se estaba animando cada vez más.
 Desde que Julia vio que leyendo se sentía mejor, nunca dejó de leer y, gracias a Ainhoa, descubrió que leer es de lo mejor.
                                      Alba Estévez 6º

El lobo en el bosque

Érase una vez una niña que iba paseando por un bosque y se encontró con su amiga Elena. Iban al río a merendar y ,caminando, se encontró con un lobo que le las quería comer. Las niñas estaban pidiendo socorro a voces pero nadie las escuchaba. El lobo, de tanto correr, se cansó y paró y mientras, las niñas consiguieron escapar. Llegaron a casa de una ancianita. Llamaron a la puerta y cuando la viejita les preguntó qué querían, le contaron lo del lobo. La anciana, muy amable, les abrió la puerta y ,al cabo de un buen rato, se fueron.
 El lobo las había estado buscando pero no las encontró y un cazador que había por el bosque, espantó al lobo para que se fuera a las montañas y no molestara a nadie más.
                                                               Carmen Mª Aránega 6º

El padre de los deseos

Había una vez un padre que había tenido dos hijos pero se murieron por culpa del síndrome de rectentunrequejarsen.
 El padre se sentía mal, solo, y a todos los niños que veía les preguntaba si necesitaban algo. Ellos pedían de todo y él se los compraba: bicicletas, juguetes, ropa...El último le pidió comida porque pasaba hambre y, además de comida, lo llevó a la feria y se subieron en todas las atracciones. ¡El niño pasó el día más fantástico de su vida! Ya agotado, el pequeño niño se fue a la cama y se puso a contar ovejitas.
                                                   Juan Manuel Marcos 6º

Cazagigantes Guadix

 Era una noche tranquila. Lucas estaba dando las buenas noches a Pedro, su hijo y éste, contento, intentó dormirse lo antes posible para que llegara pronto la hora de la excursión de mañana a la vía del tren de su ciudad (Guadix). Ese día, al fin, llegó. El maestro Cocaroto les estaba explicando las partes del tren cuando...¡allá a lo lejos el niño vio a un gigante¡Tenía un arco pegado en la espalda y su rostro era extremadamente feo. Les atacó con una flecha que tenía la punta de hierrofuego. En ese momento,  se dieron cuenta de que estaban en medio de la vía del tren y venía uno de frente. El chico se apartó rápidamente de la vía y empujó sin querer a su padre, haciendo que se le hincara la flecha en el corazón . El niño, muy cabreado, cogió una piedra, la tiró con fuerza y se la hincó en el ojo al gigante... Desde aquel momento, no se volvieron a ver más gigantes en Guadix.
                                                               José Francisco Triviño  6º

El paraguas fantástico

 Había una vez un paraguas mágico que, por cierto, era el menos apreciado por su dueño y por eso estaba muy triste siempre. A su dueño, llamado Pablo, no le gustaba porque era un paraguas muy simple: azul entero, con un el bastoncillo negro.
  Un día, no paraba de llover y Pablo se aburría tanto que decidió salir a pasea. Cogió un paraguas sin mirar cuál había cogido y, por suerte, cogió el paraguas fantástico. Al rato, paró de llover. Dejó el paraguas encima de un muro y, como era mágico, con las gotas y su magia, se pintó de muchos colores: azul, verde, amarillo, rojo...Cuando Pablo volvió, cogió al paraguas sin mirarlo y , al momento dijo: "Oh, no he cogido mi paraguas - pero pensó quedarse con el otro bonito paraguas. Desde ese día, siempre que salía a la calle y estaba lloviendo, cogía aquel precioso paraguas.
                                       Victoria Maíllo  6º

El deseo de navidad 

  Érase una vez, en el año 1972 , en Inglaterra, una niñita llamada Paula que vivía en un orfanato. El orfanato tenía muy pocos fondos y para poder mantenerlo con  todos sus gastos Paula, junto con sus compañeros de habitación ,se levantaba a las seis para poder vender velas en el mercado del pueblo.
  Ya era Navidad y Paula pidió lo mismo de todos los años: que una familia la adoptase.
  Un día, vendiendo velas, era el día más frío de navidad, cuando la niñita se  disponía a irse, se le cayeron todas las velas. Justo en ese instante apareció una pareja que la ayudó y la llevó al orfanato. La pareja se quedó profundamente  enamorada de la niña
  Al día siguiente, fueron a adoptarla y ,Paula se sintió feliz porque sabía que se había cumplido su deseo.
                                      Victoria Ruíz   6º

Un niño que no quería leer

  Había una vez un niño que no quería leer: Un día fue a un bosque a coger flores para su mamá. Apareció un cartel que ponía HAY UN PERRO SUELTO, pero como no quería leer el niño, pasó por allí y el perro le dio un susto de muerte.
 Entonces el niño salió corriendo corriendo y se salvó. Siguió andando y en otro cartel ponía CUIDADO CON LAS ABEJAS. Apareció y salió corriendo. Entonces llegó a los campos de flores y con todo lo que había pasado, el niño aprendió a leer. Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
                                      Elisa Espósito 5º

Don Chiquilón, el niño pequeñito

 Érase una vez un niño que era muy pequeñito.
 Un día, sus amigos vinieron a su casa para que se saliera a la calle a jugar; pero la madre decía que no se podía salir porque era muy irresponsable y la madre tenía miedo por si lo pisaban.
 Un día le preguntó a sus amigos cómo podía hacer para crecer, pero los amigos no le dieron solución. El niño Chiquilón, como era tan desastre, se salió a la calle sin que la madre lo supiera. cuando salió, la gente gigante pasaba y pasaba corriendo y saltando. De pronto, uno de los amigos de Chiquilón lo pisó sin querer
y, cuando llegó a casa Chiquilón, la madre le echó una gran regañina.
                                                  Silvia Muñoz Romero 5º


Mi caballo Azabache

  Érase una vez un niño que tenía un caballo que se llamaba Azabache.
  Todos los días iba a llevarle paja. Lo quería mucho y él también me quería un montón. Íbamos siempre a jugar.
  Pero...un día me levanté y no estaba en mi casa. Fui corriendo a toda máquina y me lo encontré con unos ladrones en una casa abandonada. Le estaban pegando con una fusta y el niño estaba llorando. El niño fue a pedir ayuda a la comisaría del pueblo. Todos fuimos en busca del caballo. Los ladrones salieron corriendo y ¡el caballo estaba bien!
   Alejandro Soria 5º

Ser madre a los doce años

 Esta historia ocurrió un 13 de mayo de 1.998. Había una vez una niña llamada Julia. Era muy bonita, amable, cariñosa y siempre estaba alegre.
 Un día, paseando por su ciudad, de repente, un sinvergüenza la cogió y lo peor la ¡violó!. Ella, sin saber qué hacer se marchó de casa.Sus padres, aterrorizados se preguntaban dónde estaría su hija. Por desgracia, ese hombre la dejó embarazada. Cuando Julia se enteró ...tenia miedo de volver a casa; su madre lo iba a pasar muy mal...y no volvió a casa.
  A los nueve meses, Julia tuvo un bebé y estuvo con él hasta que la joven mamá cumplió 18 años y su bebé cinco añitos. Harta de estar sola, volvió a su hogar y, cuando su madre la vio, una pequeña lágrima salió de sus ojos. La madre de Julia no paraba de preguntar dónde había estado, dónde vivía y...cuando vio al bebé gritó: ¿quién es ese niño?
-Es mi hijo-dijo Julia -no te enfades. Voy a contarte todo, incluso lo peor.
 La mamá de Julia estaba muy muy nerviosa esperando la explicación de todo aquel horrible misterio que ya  era un mal recuerdo nada más. Su madre la abrazó tan fuerte, que  le hizo hasta daño. Las dos cuidaron para siempre a ese niño maravilloso, y procuraron olvidar lo malo.
    Adrián Martín 5º

El pajarillo encantado

 Un día, en un campo, me encontré un pájaro herido y entonces lo cogí, lo llevé a mi casa y mi madre no lo quería. No no sabía dónde meterlo hasta que descubrí un lugar y lo tuve que curar. Lo dejé donde lo encontré pero el pájaro no se quería quedar allí y me seguía todo el rato. Entonces pensé en mi abuelita, que estaba muy sola; le llevé al pajarito y se puso a llorar de alegría porque cuando era joven, en su casa, su padre siempre tenía pajaritos: jilgueros, canarios. ¡Gracias, abuela!
                                             José Daniel Valverde 5º


El fantasma Rocosos

 Érase una vez un fantasma llamado Rocosos. Es muy peligroso porque si te ve, te corta el cuello. Ya le ha pasado a mucha gente y toda esa gente está en su guarida secreta.
Una niña llamada Celia ha puesto muchas denuncias, pero le han dicho que no pueden hacer nada porque no tienen pruebas. Hasta que un día se le apareció a Celia y ésta cogió un bate y le pegó al aire porque no podía  verlo. Y se fue.
  Celia corría peligro y apareció Alejandro para ayudarla a capturar al fantasma. Pensaron en un plan y se les ocurrió poner una red pero el fantasma les escribía: "Marchaos de aquí". Se colocaron delante de la red y lo cogieron. Se lo enseñaron a la policía y lo encerraron. Les dijo dónde estaba su guarida y todos juntos fueron a enterrar a los fallecidos.
    José Mª Ruiz  5º

 León en la nieve

  Érase una  vez un león que vivía en la selva. En la selva hacía calor, demasiado calor para retozar en la hierba y demasiado calor para hacer otra cosa que no fuera echarse a la sombra ,pero hasta para eso hacía demasiado calor.
  El león dijo:"ya sé, buscaré un sitio más fresco". Así que guardó su cepillo de dientes y su peine, en su maletín de viaje y abandonó la selva. León anduvo y anduvo durante todo el día.
  Había oscurecido ya, cuando el león llegó a las colinas donde hacía fresco. León estaba muy cansado. Se tumbó y se quedó dormido. Cuando despertó, estaba tiritando de frío. Lo cubría un manto blanco y suave. León se levantó, se sacudió y cogió un puñado de aquella cosa suave, blanca y fría. La olía pero no olía a nada.Dio unos pasos y vio que sus propias huellas lo seguían. Echó a correr y, de repente,¡plaf! dio un resbalón, salió despedido y cayó sentado.
- Qué divertido- gritó. Me llevaré algo de esta cosa fría para mis amigos. Les encantará.
   Así que llenó su maletín con aquella cosa blanca y fría, regresó a la selva y, al llegar, León vio a don Elefante y a la señora Mandril.
- Mirad lo que he encontrado- les gritó.
  León abrió su maletín y lo volcó. Pero del maletín sólo cayó un peine, un cepillo de dientes y un poquito de agua.
 -Yo había guardado aquí una cosa fría y suave que encontré en las colinas-dijo León.
 Así que León llevó a todos sus amigos a la colina para que vieran esa cosa fría y suave. Una vez allí, todos jugaron felices y contentos.
  Ainhoa Casado 5º

El oso y el pez

  Este cuento trata sobre un oso y un pez que se llevaban muy bien.
  Al cabo de dos días, se pelearon a saber por qué, con lo bien que se llevaban.
  Al día siguiente, el oso se fue a pescar y se encontró con el pez. El pez le preguntó:"¿es que ya no eres mi amigo, oso?
-No, es que ya no quiero pescado ya.
  Y así estuvieron durante un año, cuando el oso iba a pescar.
  Al cabo de unos meses, el oso se acordó y fue al río. LLegó el pez y le dijo:"¿no decías que tú ya no eras mi amigo oso?
-Sí, pero...-respondió el oso. Hace mucho tiempo me acordé de lo que te hice, yo sé que fue muy injusto ¿me perdonas?
-Vale, pero que no vuelva a ocurrir.
-Lo prometo-contestó el oso-porque me he dado cuenta de que tú eres mi único amigo.
  Y colorín colorado, este cuente se ha acabado.
                            Miguel Delgado 5º

Historia de miedo

 Esto era una vez una muchacha ,con sus amigos, a la que se acercó otro chico y empezaron a conocerse. Estuvieron toda la noche hablando. Pasaron una noche muy bonita los dos juntos. Después de pasar toda la noche juntos, llegó la hora e que se fuera la muchacha a su casa. Él le pidió acompañarla hasta su casa y ella dijo que sí. De camino a casa, a María,la muchacha, le dio frío y el chico,llamado Juan, le prestó su cazadora.
 Llegaron a la casa de María y se despidieron con un beso en la mejilla.
 A la mañana siguiente, María se dio cuenta de que tenía aún la cazadora de Juan y fue a devolvérsela a su casa. Al llegar, tocó a la puerta y salió una mujer. María le preguntó por Juan y la señora,que era la madre del joven, le dijo que era imposible que su hijo le hubiera prestado nada porque hacía un año que había muerto. Y colorín colorado, este cuento de miedo se ha acabado.
                            Pedro Rodríguez 5º

Las matemáticas de Natalia

Había una vez una niña que se llamaba Natalia. Siempre estudiaba ¡tres horas diarias! y no se salía a la calle porque entonces suspendía los exámenes de matemáticas. Sus padres pensaban que la pobre niña no estudiaba y por eso iba mal en mates. Pero no era verdad, sólo era mala suerte.
  Un día, Natalia se hartó de estudiar y se lo dijo a sus padres. Cuando tenía el examen ella pensaba que, como siempre, iba a suspender. Hizo el examen con mucho cuidado y cuando le dieron la nota...tenía un 10.
¡Qué cosas más raras pasan en esta vida!
                   Almudena Lorente Balboa 5º

Los restos humanos del pozo

 Érase una vez una niña que nació sin un ojo y el otro lo tenía medio descolgado. Sus padres no la querían y la tiraron a la basura.La pobrecita aprendió a comer de allí y ponerse la ropa que encontraba.
 La niña se llamaba Verónica pero siguió creciendo y, cuando tuvo diez años, siempre iba al pozo a mirar su reflejo.
 Un día, el diablo se le apareció y le contó lo que había pasado cuando ella nació. Verónica siempre veía al demonio en todas partes y hacía cosas malas, como él. Éste la convenció para vengarse de sus padres y matarlos por lo que le habían hecho.
 Por la noche, fueron a la casa y se los llevaron al lado del pozo. El demonio la traicionó e hizo que un monstruo saliera de repente y los despellejara a los tres. Los restos quedaron fuera del pozo: el cerebro, los ojos, el pelo...
         Nadie pudo nunca saber qué había pasado realmente aquella noche de Halloween
                                                 Samuel García Sances 6º

Caty

 Caty es una niña de 13 años, muy alta e inteligente.
 Se acercaba la Navidad y la madre de Caty compró el último décimo de lotería.
   Caty fue un día de visita con su madre a la residencia de ancianos y, cuando llegó, vio un montón de ancianitos que se sentían muy solos. Caty se sintió muy triste y, después de un rato, se fue con su madre a casa.
 La madre de Caty recordó que tenia un billete de lotería y, al llegar a casa lo miró ¡le habían tocado 60.000 euros!. Se pusieron muy felices. Caty le habló a su madre de cuando fueron a la residencia, y donaron 30.000 euros. Se sintieron muy felices y, a partir de ese momento, iban a visitar a los ancianos todos los días.
Juan José Rodríguez 6º


El andén perdido

 Se iba haciendo de noche y en el pueblo, las sombras crecían más u más. Claudia era una niña simpática que todas las noches salía a pasear con su perro. Siempre hacía la misma ruta. Estas últimas noches, al pasar por las vías del tren viejo, veía una luz que parpadeaba y se acercaba a ella. La niña iba hacia la luz pero cuando estaba cerca, la misteriosa luz desaparecía. Ahora, la policía está buscándola
  Anoche, Claudia salió como cada noche a pasear a su perro y  no volvió a su casa. La policía está buscándola por todo el pueblo.
¿Te apuntas a intentar solucionar este gran misterio?
                                             Inmaculada Morillas 6º